‘Cerebros Destruidos’ es el single de presentación de PROYECTO PUNIK.

Proyecto Punik debuta con una versión distópica de «Cerebros Destruidos» en homenaje a Eskorbuto
Como declaración de intenciones, el colectivo musical Proyecto Punik irrumpe en la escena con una poderosa reinterpretación de Cerebros Destruidos, el icónico tema de Eskorbuto. Lejos de tratarse de una versión simple, el grupo propone una reconstrucción electrónica del himno generacional, llevándolo a un terreno oscuro y maquinal.
Con un bombo seco y marcial, sintetizadores desgarrados y una voz espectral, Proyecto Punik transforma la canción en una distopía sonora que mantiene intacto el mensaje de denuncia social que caracterizó al trío de Santurce. La propuesta no solo rinde homenaje al legado de Eskorbuto, sino que lo proyecta hacia el futuro, adaptándolo a una nueva era marcada por la desinformación, la manipulación y el control social.
Proyecto Punik: electrónica combativa desde Navarra que fusiona punk y distopía sonora
Desde Navarra irrumpe en la escena Proyecto Punik, una nueva propuesta musical nacida de la mente de un productor con una amplia trayectoria en la música navarra.
Con un pasado vinculado a bandas de rock, pop, psicodelia y música familiar, además de la composición de bandas sonoras para documentales, el artista lanza ahora su primer trabajo bajo este nuevo alias.
Proyecto Punik se desmarca de la electrónica convencional para ofrecer una experiencia sonora sucia, combativa y afilada. Es una propuesta que, en lugar de invitar a la evasión, convierte la pista de baile en un espacio de confrontación, crítica y resistencia. Heredero del punk más crudo y del espíritu DIY, el proyecto canaliza esa energía a través de sintetizadores ásperos, ritmos industriales y texturas opresivas.
“Es música para bailar con rabia, para desprogramar cerebros y para golpear con cada pulsación”, afirma el creador, que define su sonido como punk electrónico sin concesiones.
El estilo de Proyecto Punik bebe de influencias como Eskorbuto, DAF, Throbbing Gristle, Suicide, Nitzer Ebb, The Hacker o Arca, y combina elementos del EBM, electro-industrial y synthpunk.
La propuesta se caracteriza por ritmos duros y mecánicos, sintetizadores distorsionados, atmósferas densas, voces filtradas y alienadas, y letras que abordan temáticas políticas, sociales y económicas.
El debut cuenta con la colaboración especial de Guillermo Mutiloa (Motu Estudio), productor navarro con un sólido recorrido en la escena independiente, cuya aportación ha sido clave para dotar al proyecto de fuerza y claridad sonora.